“El Premio Transforma, sin duda, ha contribuido a reforzar la imagen de Auditoría Interna como departamento puntero en digitalización dentro de Iberdrola”

Así lo destaca Raquel Jurado, responsable de Dirección de Auditoría Interna de Iberdrola, en una entrevista realizada para el Instituto en el marco de la segunda convocatoria de los Premios IAI España, y en la que aborda los desafíos en materia de innovación para Auditoría Interna.

 

– ¿Qué ha supuesto recibir el Premio Transforma en la I Edición de los Premios IAI España? 

Recibir el Premio Transforma supuso para todo el equipo un gran sentimiento de orgullo, de saber que el esfuerzo y el trabajo bien hecho a lo largo de los años se acaba premiando, y también nos sirvió internamente para hacer retrospectiva y dedicar tiempo a celebrar logros, cosa que, enfrascados como estamos en el trabajo del día a día, no hacemos con la frecuencia que deberíamos.   

Más allá de este sentimiento de equipo, este premio sin duda ha contribuido a reforzar la imagen de Auditoría Interna como departamento puntero en digitalización dentro de Iberdrola. Tanto la Comisión de Auditoría como nuestros clientes auditados ya estaban familiarizados con nuestra forma de trabajar y comunicar los resultados de la auditoría continua usando DIANA; no obstante no conocían otros departamentos de Auditoría Interna fuera, con lo que este premio nos sirvió para proyectar esta imagen diferencial dentro de la empresa, a lo cual contribuyó también la campaña de comunicación interna de la noticia del premio que se desplegó en todo el grupo.  

Por último, diría que el premio nos ha servido de revulsivo para continuar, invirtiendo tiempo en innovación y digitalización que desde hace años llevamos impulsando y nos ha dado más fuerza y ánimo para seguir pensando e implantando herramientas como DIANA.  

 – ¿Qué opinión os merece que el Instituto haya impulsado este tipo de reconocimiento? 

Como mencioné en el acto de entrega de los premios, los auditores internos no solemos tener muchas alegrías, así que considero que esta iniciativa del Instituto era muy necesaria: necesitábamos de un foro como el que brindan estos premios, para la celebración y el reconocimiento de las iniciativas innovadoras y de éxito que llevamos a cabo en nuestras organizaciones y donde podamos compartirlo entre nosotros.  

Igualmente, la repercusión en medios que han tenido los premios refuerza y pone en valor nuestra profesión, al tiempo que muestra cómo a través del impulso de la función de Auditoría Interna se mejoran los procesos de las control y gobierno de las organizaciones en general.  

De aquí en adelante, estoy convencida de que estos galardones van a representar un estímulo para que las compañías sigamos invirtiendo en innovación y digitalización, explorando nuevas formas y más eficientes de auditar y, en definitiva, continuar trabajando desde la mejora continua.   

– ¿Qué os inspiró en Iberdrola para poner en marcha vuestro proyecto ganador, DIANA (Data Intelligence Analytics for Audit)? 

Yo diría que, como casi todos los inventos en la historia de la humanidad, la inspiración para crear DIANA surgió de la necesidad. Dentro del plan estratégico de digitalización de la Función, llevábamos varios años desarrollando el proyecto de Auditoría Continua, y nos dimos cuenta de que necesitábamos una forma más ágil, sencilla y sostenible de comunicarnos con los auditados, sin perder la trazabilidad e integridad de la información. En definitiva, estábamos auditando de forma novedosa utilizando algoritmos de inteligencia artificial, pero seguíamos comunicando los resultados como hacíamos con la auditoría tradicional. Con el volumen de eventos y alertas de auditoría continua en todo el grupo y las previsiones de crecimiento que teníamos, no podíamos continuar gestionando esos casos por correo electrónico, y de esa necesidad surgió DIANA.  

– ¿Qué destacaríais del proyecto? 

Lo que más destacaría de DIANA es su sencillez y robustez. Nos permite comunicarnos con los auditados de una manera muy fácil y amigable (a través de Teams) y, al mismo tiempo, nos da toda la robustez y trazabilidad que necesitamos, permitiéndonos documentar y soportar los análisis realizados y las respuestas recibidas de los auditados y las organizaciones colaboradoras. 

También me gustaría mencionar que DIANA es la ultima herramienta que hemos incorporado dentro del ecosistema de herramientas de analítica de datos que utilizamos para el proyecto de Auditoría Continua, sin el cual DIANA no hubiese tenido razón de ser. Este proyecto está gestionado por el Digital Hub de Auditoría Interna, donde se integran perfiles técnicos con conocimientos de sistemas, perfiles funcionales expertos en los procesos auditados y perfiles de científicos de datos, en mi opinión este equipo multidisciplinar que funciona de manera cohesionada bajo unos objetivos comunes es la clave principal del éxito del proyecto que dio lugar a DIANA.  

– ¿Qué otras iniciativas innovadoras estáis desarrollando en Auditoría Interna? 

Actualmente, estamos desarrollando pilotos para el uso de inteligencia artificial generativa en la verificación automática de pagos y facturas. Esta tecnología promete revolucionar nuestros procesos, permitiéndonos realizar verificaciones de manera más rápida y precisa. Aunque no podemos revelar todos los detalles aún, estamos muy emocionados por su potencial y esperamos poder compartir pronto el proyecto con el Instituto de Auditores Internos y todos sus socios. 

– ¿Qué creéis que es lo más importante para seguir impulsando la innovación en Auditoría Interna? 

Lo más importante para seguir impulsando la innovación es la actitud de los auditores internos y no tener miedo a probar cosas diferentes y, para eso, es imprescindible contar con el apoyo y esponsorización al más alto nivel, en nuestro caso, Sonsoles Rubio, que es nuestra Directora de Auditoría Interna y Riesgos, quien cree firmemente en el poder de transformación de la digitalización y nos anima a probar nuevas herramientas y nuevas de trabajo de forma continua. También es relevante el apoyo y convencimiento de la Comisión de Auditoría, a quien presentamos regularmente los avances de nuestra estrategia de digitalización, y quien en última estancia aprueba los recursos necesarios para llevarla a cabo.  

Ese impulso nos ha llevado estos últimos años a poner en marcha diversas iniciativas para extender ese espíritu innovador. Así, hemos incorporado nuevos perfiles técnicos a nuestros equipos de auditores, hemos creado un departamento de gestión del cambio que nos ayuda en nuestro día a día y que colabora activamente en todos los nuevos procesos y cambios que hacemos en el área, hemos, igualmente, adoptado nuevas formas de trabajo agile que nos ayudan a ser más eficientes y que facilitan la innovación y, por último, también destacaría la creación del Digital Hub, que mencionaba anteriormente,  que es el área especializada dentro de Auditoría Interna a través de la cuál canalizamos la mayoría de actividades de innovación y que es donde ha nacido y crecido DIANA. 

 – ¿Qué desafíos veis en la adopción de nuevas soluciones que faciliten la función de Auditoría Interna en las organizaciones? 

La adopción de nuevas soluciones en Auditoría Interna presenta varios desafíos importantes. Uno de los principales es la integración de este tipo de tecnologías en los sistemas existentes. Soluciones innovadoras, como la inteligencia artificial generativa y la analítica de datos avanzada, deben integrarse de manera efectiva con los sistemas ya existentes y la arquitectura de nuestras organizaciones para maximizar su potencial. Esto puede requerir un esfuerzo significativo de gestión dentro de nuestros equipos y en muchas ocasiones puede que nos lleve a soluciones que no son las inicialmente previstas. 

Un reto al que nos hemos enfrentado recientemente relacionado con el desarrollo de casos de uso de inteligencia artificial generativa, ha sido relativo al proceso de cálculo del retorno de inversión que marcan desde la Dirección de sistemas de la compañía en base al cual seleccionan y priorizan los proyectos a desarrollar. Es indudable que la inteligencia artificial tiene un coste y en el caso de Auditoría Interna, el retorno no se mide en términos económicos sino en términos de amplificación del nivel aseguramiento, por lo que hemos desarrollado un modelo para “cuantificar” el nivel de aseguramiento adicional que nos brinda nuestro caso de uso y así hacerlo comparable a otros proyectos de compañía.  

Otro desafío es la dificultad de encontrar perfiles especializados. La adopción de tecnologías avanzadas requiere habilidades específicas que, aunque comienzan a darse en nuestros equipos, tradicionalmente no formaban parte de Auditoría Interna, desarrollar y mantener estos perfiles supone un reto para todas las organizaciones y requiere voluntad y capacidad de aprendizaje constante.  

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